Tantos días encerrado en casa, terminas volviéndote loco si no tienes algo en lo que concentrar tu atención. Además, si su trabajo se realiza al aire libre, en una instalación deportiva o en un campo de fútbol. Durante este periodo, El fútbol aragonés se mantiene en forma tanto como sea posible, pero para los atletas, es una tarea difícil. “Estamos acostumbrados a trabajar al aire libre y es difícil porque la casa está carcomiendo sus paredes”, dice Teresa Rey, capitana de CFF Zaragoza. “Es raro pasar de la vida cotidiana a la formación y la universidad para estar en casa las 24 horas del día”, agrega su compañera Lucía Fuertes.
La competición deportiva cesa sus actividades hasta que las autoridades sanitarias autoricen la práctica deportiva con todas las garantías. Los clubes deben acostumbrarse nueva rutina Ten imaginación e ingenio para que tus jugadores no pierdan su forma. “Les dijimos qué materiales tenemos en casa y, como resultado, nos hicieron una mesa de ejercicios. Algunos tendrán una bicicleta, otros tendrán pesas, otros no tendrán nada … Entonces cada uno tiene un trabajo específico y personalizado “dice Teresa, quien, como Lucía, mantiene contacto diario con el cuerpo técnico. “Tenemos que contarles sobre los sentimientos y cómo estamos. Intentamos hacer que todo sea similar, si es necesario, tener un equipo específico, jugar con él cuando se trata de sumar y hacer diferentes ejercicios “, explica la defensa.
A través de Skype, el cuerpo técnico ha diseñado sesiones de trabajo durante las cuales puede entrenamiento conjunto y mantener contacto directo con jugadores. “Comenzamos con un trabajo de activación, luego aumentamos más la intensidad combinando muchas repeticiones con cortos períodos de descanso, el siguiente paso es el ejercicio de fuerza para terminar los estiramientos. Está preparado para que puedan trabajar sin equipo, pero les ayudamos a usar todo lo que tienen en casa. El trabajo es más efectivo si sienten que han sido entrenados ”, explica su entrenador físico, Ignacio García Casares.
El grupo también se adapta a esta nueva metodología, no es comparable a las distancias, esfuerzos y concentración que requiere el fútbol, pero como en todos los partidos, es necesario adaptarse a las circunstancias en juego. “Mantenerse así es mejor que quedarse quieto, pero creo que más adelante tendremos que hacer algo más para poder reanudar la competencia“, Dice Zaragoza Lucía Fuertes.
Debido a la incertidumbre generada, el personal continúa trabajando en espera de noticias. La temporada terminó cuando todo estaba por decidirse y los jugadores del Zaragoza CFF esperan que se resuelva de la mejor manera. “Creo que las cosas que tienen un principio deben tener un final. No sé cuándo planean tomar una decisión porque dependerá de los acontecimientos, pero nos gustaría terminarla “, concluye el capitán.