Avances tecnologicos de la historia

La máquina de vapor

Este artículo trata sobre la tecnología en la historia de la humanidad. Para la serie de libros, véase Historia de la tecnología (serie de libros). Para la disciplina académica que estudia la historia de la tecnología, véase Historia de la ciencia y la tecnología. Para un relato sobre el uso contemporáneo de las técnicas de producción, véase Tecnología. Para un recuento histórico de las tecnologías económicamente importantes, véase Tecnologías para la mejora de la productividad (historia económica). Para otros usos, véase Tecnología (desambiguación).

La historia de la tecnología es la historia de la invención de herramientas y técnicas y es una de las categorías de la historia mundial. La tecnología puede referirse a métodos que van desde lo más simple como las herramientas de piedra hasta la compleja ingeniería genética y la tecnología de la información que ha surgido desde la década de 1980. El término tecnología procede del griego techne, que significa arte y oficio, y de la palabra logos, que significa palabra y discurso. En un principio se utilizaba para describir las artes aplicadas, pero actualmente se emplea para describir los avances y cambios que afectan al entorno que nos rodea[1].

Quién inventó la tecnología

Hubo dos innovaciones tecnológicas que cambiaron profundamente la vida cotidiana en el siglo XIX. Ambas eran “fuerzas motrices”: el vapor y la electricidad. Según algunos, el desarrollo y la aplicación de las máquinas de vapor y la electricidad a diversas tareas, como el transporte y el telégrafo, afectaron a la vida humana al aumentar y multiplicar el poder mecánico de la fuerza humana o animal o la potencia de las herramientas simples.

Quienes vivieron estos cambios tecnológicos, los sintieron como mucho más que innovaciones tecnológicas. Para ellos, estas tecnologías parecían borrar los límites primigenios de la experiencia humana y dar paso a una especie de era milenaria, una Nueva Era, en la que la humanidad había roto definitivamente sus cadenas y era capaz, como se hizo proverbial decir, de “aniquilar el tiempo y el espacio”. Incluso los inventos más importantes del siglo XIX que no eran simples aplicaciones del vapor o de la energía eléctrica, como las tecnologías de grabación de la fotografía y el fonógrafo, contribuyeron a ello porque pusieron el pasado a disposición del presente y el presente a disposición del futuro.

La desmotadora de algodón

Este artículo trata sobre la tecnología en la historia de la humanidad. Para la serie de libros, véase Historia de la tecnología (serie de libros). Para la disciplina académica que estudia la historia de la tecnología, véase Historia de la ciencia y la tecnología. Para un relato sobre el uso contemporáneo de las técnicas de producción, véase Tecnología. Para un recuento histórico de las tecnologías económicamente importantes, véase Tecnologías para la mejora de la productividad (historia económica). Para otros usos, véase Tecnología (desambiguación).

La historia de la tecnología es la historia de la invención de herramientas y técnicas y es una de las categorías de la historia mundial. La tecnología puede referirse a métodos que van desde lo más simple como las herramientas de piedra hasta la compleja ingeniería genética y la tecnología de la información que ha surgido desde la década de 1980. El término tecnología procede del griego techne, que significa arte y oficio, y de la palabra logos, que significa palabra y discurso. En un principio se utilizaba para describir las artes aplicadas, pero actualmente se emplea para describir los avances y cambios que afectan al entorno que nos rodea[1].

La imprenta

El 24 de mayo de 1844, Samuel F.B. Morse envió el primer telégrafo: “¿Qué ha hecho Dios?” La frase, tomada de la Biblia, fue seleccionada por la hija de uno de los amigos de Morse. Desde entonces, la forma de comunicarnos ha evolucionado a pasos agigantados hasta el punto de que el aparato que (a veces) utilizamos para llamar por teléfono cabe en nuestro bolsillo y tiene más capacidad de procesamiento que los ordenadores del tamaño de una habitación de los años 60. Las nuevas tecnologías nos han conectado de muchas maneras, facilitando la comunicación y los desplazamientos.

Poco más de treinta años después de que Morse enviara el primer telégrafo, Alexander Graham Bell hizo la primera llamada telefónica. Sus primeras palabras fueron: “Sr. Watson, venga aquí, quiero verle”. (El Sr. Watson era su asistente.) Con el tiempo, el invento de Bell allanó el camino para hacer llamadas telefónicas a personas de todo el mundo, no sólo de la habitación de al lado. Y ahora, por supuesto, la mayoría de nosotros llevamos un smartphone o un teléfono móvil todos los días.

Antes de la televisión con cita previa y del binge-watching, las salas de cine eran el rey. Siguen siendo el mejor lugar para ver las películas más taquilleras, pero la invención de la televisión allanó el camino para el entretenimiento en casa que disfrutamos ahora. Los primeros televisores eran en blanco y negro; luego llegaron los televisores en color y el siempre cómodo mando a distancia.