Bean
Andrea Boldt lleva más de 20 años en el sector del fitness. Es entrenadora personal, entrenadora de carrera, instructora de fitness en grupo y maestra de yoga, y también tiene certificaciones en nutrición holística y de fitness.
La fibra es una parte no negociable de una dieta saludable. La fibra insoluble es particularmente importante cuando se trata de mantener el tracto digestivo en buen estado. Las fuentes de fibra insoluble son el salvado de trigo, las verduras y los cereales integrales.
La fibra dietética es de dos tipos: soluble e insoluble. La fibra soluble, presente en la avena, las judías secas y algunas frutas y verduras, se disuelve en el agua. Se compone de pectina vegetal y gomas; el gel que crea durante la digestión ayuda a que el tracto digestivo funcione sin problemas y protege contra algunas enfermedades crónicas.
La fibra soluble es también el tipo que puede ser bastante beneficioso cuando se trata de la diabetes. Un estudio publicado en la revista Experimental and Therapeutic Medicine en agosto de 2016 sugirió que un consumo mayor y regular de fibra soluble mejoraba significativamente los niveles de glucosa (azúcar) en sangre, la resistencia a la insulina y los perfiles metabólicos, sobre todo en personas con diabetes de tipo 2.
Alubia renal
Las principales fuentes de fibra insoluble y por qué la necesitaConsuma más fibra, dicen. Pero, ¿por qué la fibra es tan importante para su salud y está ingiriendo la cantidad suficiente? La fibra dietética, que incluye tanto las variedades solubles como las insolubles, se encuentra en alimentos vegetales enteros como las verduras, la fruta, los cereales integrales y las legumbres. Muchos sabemos que las fuentes de fibra insoluble pueden ayudar a prevenir o aliviar el estreñimiento. Pero los beneficios de la fibra dietética van mucho más allá. Los alimentos ricos en fibra también pueden ayudarle a mantener un peso saludable y a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y algunas formas de cáncer. Por ello, vale la pena consumir los 25-30 gramos de fibra recomendados al día, asegurándose de que la mayor parte de
Col de bruselas
El estreñimiento puede deberse a problemas que no pueden resolverse sólo con la comida. El estreñimiento grave que resulta de los medicamentos para el dolor o las náuseas, o de afecciones digestivas, como una obstrucción del intestino delgado, requiere intervención médica. Si tiene dolor, fiebre o distensión abdominal (hinchazón), llame a su médico de inmediato. No intente automedicarse con alimentos.
Si tiene un estreñimiento menos grave, lo primero que debe hacer es hablar con su enfermera o médico sobre este problema. Es posible que puedan ajustar algunos de sus medicamentos para ayudar a disminuir estos episodios de diarrea y estreñimiento. Además, la fibra es estupenda para normalizar la función intestinal. Sólo tienes que asegurarte de consumir el tipo de fibra adecuado.
Hay dos tipos de fibra: soluble e insoluble. La fibra soluble se vuelve “pegajosa” cuando se moja. La avena, rica en fibra soluble, es un buen ejemplo de ello. La fibra insoluble no absorbe mucha agua, por lo que no cambia cuando se le añade líquido.
Tanto para la diarrea como para el estreñimiento, es conveniente consumir más fibra soluble, como la avena, el salvado y la cebada. Para el estreñimiento solamente, puede añadir también algo de fibra insoluble: las frutas y las verduras son buenas fuentes. Muchas personas descubren que simplemente tomando un suplemento diario de fibra, que se compone principalmente de fibra soluble, disminuirá tanto la diarrea como el estreñimiento.
Almendra
La fibra dietética -que se encuentra principalmente en frutas, verduras, cereales integrales y legumbres- es probablemente más conocida por su capacidad para prevenir o aliviar el estreñimiento. Pero los alimentos que contienen fibra también pueden aportar otros beneficios para la salud, como ayudar a mantener un peso saludable y reducir el riesgo de diabetes, enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer.
La fibra dietética, también conocida como fibra o masa, incluye las partes de los alimentos vegetales que el cuerpo no puede digerir o absorber. A diferencia de otros componentes de los alimentos, como las grasas, las proteínas o los hidratos de carbono, que el cuerpo descompone y absorbe, la fibra no es digerida por el organismo. En cambio, pasa relativamente intacta por el estómago, el intestino delgado y el colon y sale del cuerpo.
Los alimentos refinados o procesados -como las frutas y verduras enlatadas, los zumos sin pulpa, los panes y las pastas blancas y los cereales no integrales- tienen menos fibra. El proceso de refinado de los cereales elimina la capa exterior (salvado) del grano, lo que reduce su contenido en fibra. A los alimentos enriquecidos se les vuelve a añadir parte de las vitaminas del grupo B y del hierro después del proceso, pero no la fibra.