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murcia hoy – noticias de mazarrón
Sharon, que es gerente de una tienda, explicó: “Sólo teníamos la prueba de flujo lateral del NHS. Habríamos tenido que pagar 80 libras cada uno por una prueba de PCR privada y un certificado. Básicamente estás pagando por un trozo de papel”. Tras denegarles la entrada, en la facturación les dijeron que podían ir a un centro de pruebas del aeropuerto gestionado por la organización benéfica sanitaria Nuffield Health, pero resultó que el centro no estaba atendido hasta más tarde ese mismo día. Sharon dijo: “El director del aeropuerto vino a vernos al final y nos dijo que no había personal hasta la 1 de la tarde, lo que no nos ayudó porque el vuelo era a las 12:45”.
Al no poder conseguir una prueba de última hora, lo único que pudieron hacer fue volver a casa e intentar viajar de nuevo unos días más tarde. Tras recibir los resultados adecuados de la prueba PCR, intentaron volar de nuevo a España el pasado sábado. No había más vuelos desde Cardiff, pero estaban desesperados por salir cuanto antes. Esta vez reservaron un vuelo desde Liverpool a España con Ryanair. Pero se toparon con otro muro inesperado. La aerolínea dijo que no podía aceptar la carta de admisión del hospital en España como prueba de que Christian estaba recibiendo tratamiento allí, aunque Vueling había aceptado la misma carta unos días antes. Sharon dijo: “Viajamos a Liverpool, llegamos al mostrador de facturación y no aceptaron la carta de admisión como razón para viajar, porque no demostraba que fuéramos familiares o parientes cercanos”. “A pesar de que el padre de Christian, Michael, tiene el mismo apellido que él, tampoco le dejaron ir, porque la carta no decía específicamente que era el pariente más cercano”.