Things we lost in the fire

Things we lost in the fire review

Things We Lost In The Fire’ tells the story of a woman (Halle Berry) who loses her husband (David Duchovny) and recovers the friendship he had with a childhood friend (Benicio del Toro) whom she hated because he was a drug addict.

Things We Lost in the Fire’ is directed by Susanne Bier, who recently released in our country the dogma-style film ‘After the Wedding’. As in that film, in this one Bier uses handheld camera and discontinuous editing, but in a more restrained way. The production direction results in a very elegant look and this way of filmmaking -although it seems more typical of a Danish semi-documentary film- does not clash with the sumptuousness of the great American dramas.

A wise move in the script of ‘Things We Lost in the Fire’, which was written by Allan Loeb, is to begin the story with the husband’s funeral, that is, to give us before anything else the information that he is dead -except for a very brief sequence that is set up in parallel-.

Las cosas que perdimos en el fuego goodreads

Things We Lost in the Fire: Stories (español: Las cosas que perdimos en el fuego) es una colección de cuentos de Mariana Enríquez. Publicado originalmente en español, fue traducido al inglés por Megan McDowell en 2017[1].

Las reseñas de la colección destacan el estilo oscuro e inquietante de Enríquez. Una reseña en The Guardian calificó la colección de “horripilante, violenta, perturbadora – y brillante con brillantez”[4] Jennifer Szalai, escribiendo en The New York Times, escribió “[Enríquez] está detrás de una verdad más profunda, y más perturbadora, que cualquier cosa que los estrictos dictados del realismo permitan”[5].

En una reseña en Vanity Fair, Sloane Crosley se mostró impresionada por la habilidad de Enríquez para utilizar historias sobrenaturales para explorar la agitación política de Argentina: “En sus manos, la desigualdad, la belleza y la corrupción del país se mezclan para convertirse en una manifestación de nuestros propios pensamientos y miedos más oscuros”[6].

Las cosas que perdimos en el fuego español pdf

For her first film in Hollywood, Danish director Susanne Bier opted for an ambitious drama for which she managed to recruit several prestigious actors. Halle Berry in a role similar to the one in ‘Monster’s Ball’ for which she won the Oscar, Benicio del Toro and David Duchovny, famous for being Mulder in ‘The X-Files’, although that role has haunted him without ever succeeding in the movies. The film is an intimate drama in which all kinds of current issues are crossed, and even in the background of all the drama can be seen the disappointment of America after the attack on the Twin Towers and the subsequent war in Iraq. But the film never mentions this, instead everything is set in a simpler way: a drama of characters struggling to survive in a world that constantly beats them down. A drama about addiction, to memories and to drugs.

During the preparation phase for the role, Benicio Del Toro documented himself about drug addiction, met with medical experts and attended meetings of Narcotics Anonymous associations. Sam Mendes recalls: “He got into the skin of the character and understood that all those who have been addicted must be treated with humanity, like all patients”.

Mariana enriquez

La feminidad se define con demasiada frecuencia por la imagen (y por tanto por la mirada masculina). Las mujeres se reducen a la apariencia y se juzgan en función de su grado de adecuación a un ideal mítico. El cuento de Mariana Enríquez, “Las cosas que perdimos en el fuego”, presenta una surrealista e inquietante contramitología que explora lo que ocurre cuando esa imagen es objeto de ataques, entre otros, por parte de las propias mujeres.

Todo comienza con una mujer que se ve obligada a mendigar en el metro de Buenos Aires, después de que un marido celoso le inflija horribles quemaduras que le destruyen los brazos y la cara, dejándola con un solo ojo y una raja por boca, con los labios quemados. Mientras pide ayuda a los pasajeros del metro, cuenta su historia: que su marido le echó alcohol en la cara mientras dormía, prendiéndole fuego para “arruinarla”, para que no perteneciera a nadie más. En el hospital, cuando todo el mundo esperaba que muriera y ella no podía hablar por sí misma, dijo que se lo había hecho ella misma, un trágico accidente tras una pelea. Ahora que ha recuperado la voz, la mujer del metro reclama su relato y nombra al autor. Sin embargo, sabe que nunca recuperará su apariencia; su imagen se perdió en el incendio.